Su nombre proviene de San Ginés, el Santo Patrón de la villa (junto con Santa Rosalía). Oficialmente se denominó Sanjenjo entre 1842 y 1877, y Sangenjo entre 1877 y 1982, la Ley de Normalización Lingüística aprobada por el Parlamento Gallego en 1983 cambió su denominación oficial al gallego Sanxenxo.
Saxenxo, antes de convertirse en nuestra segunda residencia, fue el destino de muchas de nuestras “escapadas”, hasta que decidimos echar raíces definitivas y convertir este pequeño paraíso en nuestro segundo hogar. Porque Sanxenxo es un precioso lugar costero para disfrutar de animadísimos veranos y de tranquilos y luminosos días en primavera y otoño.
Para nuestras “escapadas de fin de semana”, uno de nuestros preferidos era el Hotel Augusta Spa Resort, muy buena opción para familias con niños, un poco alejado del centro y de la playa pero en cuanto a instalaciones y gastronomía está muy bien:
En otra ocasión nos alojamos en el Gran Talaso Hotel Sanxenxo, justo encima de la playa del Silgar, con un spa/talaso perfecto para pasar una tarde lluviosa y no echar de menos la playa:
Actualmente su restaurante es uno de nuestros preferidos para una cenita romántica en la terraza de verano:
La mayor y más céntrica playa de Sanxenxo es conocida con el nombre de Silgar, con 800 metros de punta a punta, bordeada por el paseo del mismo nombre, supone la zona más turística, con numerosas tiendas abiertas hasta altas horas de la noche, bares y restaurantes. En su extremo izquierdo, justo al lado del Gran Talaso Hotel Sanxenxo, se encuentra la Punta del Vicaño, formación rocosa saliente que separa esta playa de la playa de Baltar en el pueblo de Portonovo perteneciente al mismo ayuntamiento de Sanxenxo, cada año estas playas obtienen el distintivo europeo de bandera azul.
Cada año construcciones de arena decoran la playa del Silgar:
Y el cielo luce de colores:
En el extremo opuesto de la playa está el puerto deportivo Juan Carlos I :
Moderno puerto donde fondean en muchas ocasiones impresionantes yates, pero sin olvidar sus raíces marineras, una parte del puerto es reservada para las pequeñas embarcaciones tradicionales:
En el paseo en dirección al puerto, nos encontramos a la estatua de La Madama, mujer caracola, obra del artista Alfonso Vilar Lamelas, donada por el autor en 1995 al municipio, está situada en una roca (La piedra del Corbeiro) a pocos metros de la orilla se ha convertido en todo un icono del Sanxenxo:
Toda esta zona muy animada en verano (más que animada, a tope !!!):
Pero también hay otros pequeños arenales más íntimos, refugio de personajes públicos muy conocidos que desde hace muchos años, cada verano, disfrutan de estas tierras:
La pequeña playa panadeira se continúa con la playa de los barcos, cuyo paseo de madera, ganado al litoral, está lleno de restaurantes:
Un paseo por el puerto y la playa del Silgar es toda una delicia que merece la pena prolongar hasta llegar a Portonovo:
Portonovo, típica villa marinera con empinadas y estrechas callejuelas,
mantiene su tradición pesquera centrada en su puerto y en su moderna lonja, pero cada vez más abierta al turismo, por lo que se llena de bares y pub que atraen cada verano la movida estival nocturna, más juvenil sobre todo.
Durante el verano, además, atrae a los turistas con un animadísimo mercadillo con numerosos puestos, la llamada Feria Multisectorial de Portonovo, para entretenerse ojeando originales complementos, cerámicas….seguro que aquí se encuentra ese regalo-recuerdo típico de estas tierras al que no se puede resistir uno.
Día de playa, paseos, terraceo con cañita …… y si el día aparece nublado, es una buena excusa para recorrer las numerosas tiendas de ropa y complementos del centro de Sanxexo y ponerse a la última moda.
Tiendas que permanecen abiertas hasta la madrugada y aún tientan a entrar, cuando disfrutas de una fantástica noche en busca de un hueco en alguna de las terrazas de copeo.
Las terrazas del puerto deportivo de Sanxenxo, animadas por los ritmos latinos:
son una buena opción para acabar la noche después de una agradable cena por ejemplo en el en la terraza del Gran Talaso Hotel Sanxenxo:
Pero en Sanxenxo hay mucho más, imposible aburrirse.
Sanxenxo para todos los gustos: cursos de vela, excursiones por la ría de Arousa, visitas a la isla de Ons:
E incluso se puede disfrutar de eventos deportivos de alto nivel, como las regatas que se celebran a menudo:
- XXVIII Trofeo R.PrinS.A.cipe de Asturias (17 y 18 de Marzo 2018)
- 19º Trofeo Hotel Callos I Silgar-31ª Regata Ruta de las Islas (3,4 Y 5 de Agosto 2018)
- 4ª Regata Rey Juan Carlos I-18ª Regata 6 mR Sanxenxo (21,22 y 23 de Septiembre 2018)
- ….. y muchas más que con frecuencia cuentan con la presencia del rey emérito Juan Carlos I, gracias a que Sanxenxo tiene el Real Club Náutico desde 1951, creado por un grupo de asiduos veraneantes deportistas de la mar, con la idea de poseer un lugar adecuado en donde reunirse y que sirviera para promocionar todas las posibilidades turísticas y deportivas que ofrece la Ría de Pontevedra, objetivo conseguido con creces a través de los años y potenciado con su Presidente: Pedro Campos Calvo-Sotelo, el patrón más laureado de la historia de la Copa del Rey MAPFRE. Todo esto, junto con el prestigio alcanzado por la institución, llevó a que en diciembre de 2003 le concedieran la organización de la salida desde Galicia de la Regata Vuelta al Mundo 2005 – 2006 «Volvo Ocean Race», lo que supuso una gran proyección internacional.
Pero aunque el mar es la esencia de Sanxenxo, también ofrece otras actividades: los aficionados al golf, tienen el campo del ayuntamiento de Meis con fantásticas vistas a la ría. Y a los que les guste el motor, Sanxenxo cuenta con un gran circuito de karts y servicio de alquiler de quads para recorrer el interior.
Mucho, mucho que hacer y disfrutar en el verano.
Incluso no es raro divisar pequeños delfines juguetones desde el muro del paseo sobre el espigón frente al Club Náutico hacia el faro.
Paseo por el espigón hacia el faro:
Paseo que bordea la Plaza do Mar en pleno centro de Sanxenxo, donde descansa la magnífica obra del escultor Francisco Leiro: el gigante Atlante, dios griego que habitaba las aguas atlánticas demostrando la inmensidad del océano:
Esta plaza, los fines de semana de Julio y Agosto se convierte a menudo, en escenario para las más renombradas orquestas y numerosas actuaciones que amenizan las noches de Sanxenxo.
Sanxenxo es una continua fiesta que culmina al final del verano con las propias fiestas patronales y la celebración del día del turista y la típica fiesta de la cebolla (Fiestas de San Ginés y día del Turista en Sanxenxo, día 25 de Agosto y Santa Rosalía y Ntra. Sra. del Carmen, en Sanxenxo, del 3 al 5 de septiembre), todo el municipio se vuelca con la despedida del verano.
Y si en pleno verano Sanxenxo es el centro de la fiesta y la diversión, también tiene un encanto muy especial en otoño y primavera, incluso en la tranquilidad del invierno, si acompaña un poco el sol, es magnífico.
Bonitos atardeceres:
Y luminosas noches:
Y en Semana Santa la devoción se vive en sus calles (Semana Santa Marzo 2018):
Cualquier momento es bueno para visitar un Sanxenxo, cambiante, ecléctico, que concilia valores, ideas y tendencias diversas: diversión, fiesta, relax, sosiego, bullicio y tranquilidad.
Cada época del año presenta un Sanxenxo diferente, un Sanxenxo en movimiento, un Sanxenxo de contrastes. Predominan los locales abarrotados que hacen el Agosto y cierran el resto del año para invernar con las ganancias conseguidas en otros lares, pero Sanxenxo no hiberna, solo descansa tranquilo ofreciendo el mismo mar, el mismo paseo, el mismo paisaje….
Por eso se puede disfrutar mucho de Sanxenxo también en invierno y contar con rincones que pueden pasar desapercibidos en el tumulto del verano.
Esto es lo que pasa con el sector básico de la economía de Sanxenxo: la hostelería y la restauración. Hay muchos y buenos restaurantes en verano, pero en invierno casi todos están cerrados, una excepción es la Taberna da Madama, cada año permanece “a pie de cañón“ tanto invierno como verano, un pequeño mesón (muy pequeño), cerquita del puerto (paseo praia de silgar 3), buena comida, muy buena atención y muy buen precio.
Pero si ya de por si Sanxenxo es un lugar para disfrutar cada minuto en cualquier época del año, descubrir sus alrededores es para no querer irte nunca de aquí.
Os los puedo enseñar, ¿vamos? …….